domingo, 7 de diciembre de 2008

Conocerlo es tratar de entender la lucha social que sigue vigente

■ Nunca lo vi flaquear, aunque lo vi ya muy fregado: Monsiváis
Othón Salazar, de los que luchan toda su vida por lo que creen
■ Que Vázquez Mota guarde sus elogios para Gordillo, dice líder de la CNTE
Arturo Cano/ II y última
Othón Salazar durante el homenaje que le rindieron las autoridades del Distrito Federal en el Museo de la Ciudad de México, el 17 de mayo de 2004 Foto: Carlos Ramos Mamahua
Othón Salazar se define: “Maestro que no sea sensible a las dolencias de nuestra patria debería buscarse otra forma de ganarse la vida… Junto a esa idea está el amor a mi raza. Soy mixteco. Mi maestro, nahuátl, nos hablaba continuamente de que había que ver el mundo con la cara descubierta, no importa que seamos indios. Comunista convicto y confeso, ayer y ahora y mientras viva”.
Carlos Monsiváis recuerda esas frases de 1993 y también que, en privado, Salazar sí se “tiraba unos rollos” comunistas, pero no era lo suyo en público. Y también que “nunca lo vi flaquear, aunque lo vi ya muy fregado, eso sí”.
Los últimos contactos del escritor con Salazar fueron por teléfono: “Hay tantas cosas que hacer, manito, pero ya no tengo la energía”.
Eso fue al final, porque la historia comenzó 50 años atrás:

Reportaje completo quí: http://www.jornada.unam.mx/2008/12/07/index.php?section=politica&article=006n1pol

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