viernes, 17 de abril de 2009

Calderón, el "moderno" Santa Anna.

Carta abierta a Barack Obama
Gilberto López y Rivas

El 21 de abril, pocos días después que usted se haya marchado de nuestro país, se cumplirá un aniversario más del ataque y ocupación del puerto de Veracruz efectuados en 1914 por la infantería de marina estadunidense, cuerpo expedicionario de larga tradición intervencionista que en su himno hace alusión a la guerra de conquista llevada al cabo por su país de 1846 a 1848, por la cual México perdió la mitad de su territorio (To the halls of Moctezuma, to the shores of Tripoli).

Así, Veracruz fue bombardeada dos veces por su marina de guerra –en 1847 y 1914, con grandes bajas entre la población civil, que –por cierto– en las dos ocasiones enfrentó heroicamente a los marines invasores, a pesar de su manifiesta superioridad bélica.

Ese 21 de abril, alumnos de la Escuela Naval Militar, hombres y mujeres de distintos orígenes sociales y algunos miembros de la colonia española ofrecieron desigual combate a las fuerzas de ocupación, mientras el ejército de línea mexicano dejaba deshonrosamente la plaza sin combatir, retirándose a Tejería. Acciones similares se dieron durante la ocupación de la capital de la República por las tropas del general Scott, quien durante los días 14 y 15 de septiembre de 1847 tuvo que enfrentarse a centenares de civiles que decidieron –a costa de sus vidas– hacer valer la dignidad nacional que el ejército de Antonio López de Santa Anna no defendió.

Carta completa, pícale aquí.